Noche de pizza y pelis… 

- "Por Dios, Javi..., ver así a tu hermana hizo que me parara!!!!".

Recostada sobre la alfombra del piso superior, con el oído pegado a la rendija de la escalera para poder escuchar la conversación que el grupo de adolescentes mantenía en la sala de la planta baja, el corazón de Ivonne experimentó un sobresalto cuando oyó las palabras de Lucas.

- "Estará hablando de mí?...", se preguntaba.

Entonces, su mano se movió bajo su corta y transparente bata hasta encontrar su tanguita, y comenzó a acariciar su entrepierna mientras continuaba oyendo...

- "Si..., apostaría que no estaba usando brassiere...", exclamó Diego.

- "Esa bata era tan corta..., estaría usando calzones debajo?"…, preguntó Lucas, buscando una rápida respuesta...

- "Sí..., pude ver las marcas de la tanga bajo la bata...", aseguró Pablo.

- "Ella siempre usa eso cuando se va a acostar", dijo Javi. "Es simplemente un conjunto de lencería nada fuera de lo habitual, pero me encanta ver como se mueven sus tetas tras ella. La otra noche la estaba usando y en varias ocasiones me rozó el hombro con sus tetas..."

Cuando Ivonne comenzó a experimentar lo que ella consideró "inocentes fantasías" respecto de su hermano Javier y sus amigos de la preparatoria, sintió un leve sentimiento de culpa que daba paso a sus repetidos orgasmos.

Pero con el tiempo, esos sentimientos de culpabilidad fueron desapareciendo, a medida que las fantasías se hacían más frecuentes y las escenas que ella imaginaba en su mente se volvían más interesantes. Vaya que los adolescentes habían causado una revolución en ella, haciéndola tener pensamientos que hacían que se mojara cuando cruzaban por su mente.

Últimamente, el pensar en los chicos prácticamente le ocupaba todo el tiempo. Se sorprendía de que no podía sacarlos de su mente.

Ahora la fantasía de verse seduciendo a su hermano, e incluso a sus amigos, se transformó en la esperada vía de entretenimiento de una vida que ansiaba conseguir lo que quería...

Ivonne había estado muy ansiosa esperando lo que los chicos llamaban  "viernes de pizza y videos". Lógicamente, no esperaba que nada extraño sucediera, pero tenía la pequeña esperanza de que el más mínimo detalle le sirviese para echar más leña a esas fantasías: un leve coqueteo de su parte, quizá el que alguno de los chicos le dedique alguna mirada más allá de lo normal a su cuerpo, la lógica curiosidad sexual de ellos a esa edad, el verlos en camisetas y shorts, pijamas e incluso en ropa interior...

Pequeñas pruebas, inocentes juegos..., como los que Ivonne venía desarrollando con Javi.

Cuando ella comenzó a sentirse sexualmente inquieta por Javi, se dedicó a darle muchos abrazos, que duraban más de la cuenta. Esto, de a poco, fue avanzando hacia besitos en la mejilla y, muy recientemente, en un pequeño piquito en los labios. Siempre dejándolo ver un poquito de más su cuerpo, cuerpo de mujer ardiente y ganosa.

Cuando la figura de Ivonne captó la atención de Javi, el no dejaba de admirar los pechos de su hermana moviéndose libremente bajo la bata. Entonces llevó las cosas un poco más lejos, permitiendo que él entrara en su cuarto cuando ella estaba en lencería, o elogiando el cuerpo de su hermano que estaba en pleno desarrollo. También, por que no; presionando sus pechos contra la espalda de él cuando lo abrazaba, haciéndolo estremecer al rose de sus pezones duros y excitados. 

Nada grave en un principio, pero la tensión sexual entre ellos había llegado a un punto muy álgido...

Y las cosas parecían ir por buen carril con los amigos de Javi, también. Ivonne notó a un par de ellos dedicándole algunas miradas más largas de lo habitual a sus tetas en éste último tiempo, tanto como admiraban sus nalgas y torneadas piernas.

Más allá de todo lo que se dice hoy en día sobre el prematuro despertar sexual de la juventud, Ivonne estaba prácticamente segura que ninguno de ellos había estado íntimamente con alguna chica. Todos eran novatos en cuanto al sexo, incluso al de ellos mismos. 

Pero aún a sus 39 años, Ivonne no se cortaría un pelo en seducir, calentar y en algún momento extremo, poder acostarse con cualquiera de ellos... La atraen y está acostumbrada a tomar lo que quiere.

Además de su hermano Javi, estaba Pablo, quien era el mejor amigo y el más extrovertido del grupo. Ivonne lo conoce casi desde bebé...

Diego, con ese rostro tan perfecto, que vivía a dos casas de la suya desde hacía un par de años... Lucas, el moreno de ojos claros y Rafa era más bien llenito, con gafas y muy educado...

El "viernes de pizza y videos" estaba siendo un éxito en varios aspectos.

Estaba comenzando a llover muy fuerte, lo que hacía prácticamente imposible que cualquier visita indeseada llegara hasta allí...

Todo esto le quitó de la cabeza a Ivonne cualquier preocupación, por lo cual procedió a darse un baño y a vestirse con una bata delgada y un diminuto conjunto de lencería en un horario más temprano que el usual. Sus zapatillas altas completaban el sensual cuadro.

Ella ya había pensado de antemano en que debía quedarse un rato en la cocina con esa vestimenta, para que cuando alguno de los chicos fuera en busca de refrescos, pudiera verla así. Antes que después, todo salió como había planeado. Todos ellos dieron vuelta por la cocina y le dedicaron unas miradas muy fuertes. Y también ella pudo darse un pequeño regalo, viendo a Pablo y a Diego en shorts, y con camisetas ajustadas. 

Y ahora esos comentarios sobre sus tetas...

"Sus piernas son deliciosas...", dijo Diego. Escuchando por el hueco de la escalera, Ivonne introdujo su mano bajo su tanga...

"Diego..., trajiste el video porno de las MILF?", preguntó Javi...

"Sí..., quieren verlo ahora?".

"Esperemos un rato, hasta asegurarnos que mi hermana esté dormida. También podemos entrar a  Internet y les mostraré unos páginas que ni se imaginan".

"Qué chicos tan calientes...", pensó Ivonne.

Tras esto, se dejó caer sobre su cama.

Se dio cuenta que no tenía ninguna otra excusa para bajar nuevamente, por lo cual se dio por vencida..., y se puso a imaginar una nueva fantasía, que pudiese llevarla hasta ese ansiado orgasmo.

Sobre la cama, Ivonne se abrió la bata, y comenzó a dibujar círculos con uno de sus dedos alrededor de sus tetas y clítoris. "Veamos..., con cuál de los chicos quiero fantasear hoy...?"

De repente, la luz de la lámpara de su habitación se apagó, y sólo se percibía un silencio alarmante. Los voces de desconcierto de los chicos dieron la pauta a Ivonne de que se había cortado el suministro de corriente debido a la lluvia.

Ivonne encontró como pudo su bata, y volvió a ponérsela en la oscuridad. Se calzó las zapatillas y con pasos temerosos, se las ingenió para llegar al corredor, y bajar las escaleras hasta la cocina, donde guardaba la linterna. Una vez que la encontró, fue hacia donde estaban los chicos, que miraban por la ventana la lluvia sobre el jardín.

"Vaya tormenta", dijo Lucas, Ivonne se acercó por detrás para observar, quedando sus rostros muy cerca, tanto que ella podía sentir la respiración del chico.

Se sintió bien, tanto que no dudó en presionar disimuladamente uno de sus pechos sobre el hombro de Lucas, que no hizo movimiento alguno por separarse...

Del otro lado de la casa, alguien gritó que la luz se había cortado en toda la cuadra, cosa que Ivonne comprobó de inmediato.

Pero lo que comprobó mejor, fue que Lucas parecía estar rozando intencionadamente su pecho con la espalda, lo que hizo que la adrenalina fluyera a mares en su cuerpo... Su pezón de inmediato se erizó, haciéndola sentir una descarga de placer.

Cuando notó que el resto de los chicos entraban a la sala, Ivonne se separó de Lucas y fue a buscar otra linterna y una lámpara de baterías, de esas que se usan en los campamentos.

Ivonne no dejaba de preguntarse cuanto podrían verle a través de su bata, con una luz tan tenue...

De lo que sí estaba segura, era que podía ver perfectamente a Pablo y Diego enfundados en sus pegados shorts.

"Chicos..., creo que ya es muy tarde como para que se vayan, y la calle además está completamente a oscuras, lo que no hace para nada aconsejable que intenten manejar de regreso. Por qué no nos sentamos y esperamos a que vuelva la luz...?", explicó Ivonne, asumiendo nuevamente el rol de hermana responsable y protectora.

Estaba empezando a sentirse el frío, y Ivonne supuso acertadamente que sus pezones se estarían poniendo duros y erectos,... frente a los chicos. Y las miradas que ella recibía de ellos los ponía todavía más excitados...

"Vamos a poner algo de leña en la chimenea..." dijo..., Javi comenzó a ayudarla a hacerlo. Mientras Ivonne se movía buscando leña y periódicos viejos para encenderla, se dio cuenta que sus tetas; al estar sin sujetador, bailaban juguetonamente, y no tenía dudas de que los adolescentes estarían mirando el espectáculo.

Tan pronto se agachó para acomodar la leña, notó como su corta bata se levantó. Lo suficiente como para darse cuenta de que su tanga y sus nalgas estaba quedando a la vista de los chicos. Excitada de solo pensarlo, se agachó aún más, provocando que se viera una buena parte de su trasero con la tanga clavada en su colita...

Pronto el fuego estaba encendido, quedaban aún dos problemitas: uno era que sin electricidad, no había televisión, no computadora, ni internet..., los chicos se aburrirían pronto. Y la segunda, era que hacía mucho frío como para que ella volviera a su habitación...

"Chicos..., adivinen qué?. Esta es la única habitación con chimenea en toda la casa, por lo cual tendrán que aguantarme esta noche con ustedes, no quiero morir de frio..."

Ivonne estaba de pie en medio de los chicos, y rogaba porque la silueta de sus tetas pudiera verse a través de la fina tela. Su postura era sugerente, incluso hacía por sacar las nalgas y levantar el pecho a fin de lucirlos en todo su esplendor.

Los chicos no le quitaban la vista de encima... se la comían.

A pesar de que no lo dijeran, ella esta segura; después de haber oído aquella conversación, de que a ellos no les importaba en lo más mínimo tenerla cerca, y menos vestida así... tan solo con la corta bata transparente, tanga y sus inseparables zapatillas altas.

Mientras los chicos discutían sobre que hacer, Ivonne se sentó a un costado del fuego, disfrutando de su buena suerte por tener a "sus" chicos esa noche...

Todo se estaba dando en forma perfecta para ella...

La calentura de Ivonne se incrementaba cada vez más, hasta llegar al punto en que decidió tirar al viento sus miedos, y disfrutar de la situación... tomar lo que ella quería, lo sabía hacer y estaba dispuesta a tenerlo, no después, en ese momento.

Mientras los chicos se quedaban sin ideas sobre que hacer, Ivonne intentaba recordar algún juego de los de su época. 

"Alguna vez jugaron a Pasar la Fruta...?"...

La mayoría de los chicos miró con cara de no entender, pero Javi asintió: "Sí..., es ese juego en el que tienes que ponerte una fruta entre el cuello, y tienes que pasársela a otro sin usar las manos..., cierto?"....

"Exacto", dijo Ivonne. "Se supone que es un juego de Chico/Chica, pero dada la situación, cada uno de ustedes jugará conmigo". Javi, trae una pelota… indicó, a lo que su hermano obedeció de manera inmediata, casi urgente. 

Ivonne se puso de pie, se colocó una pelota de tenis sostenida en el cuello y se acercó a Pablo, quedando a unos centímetros de él. Pablo se inclinó, y presionó su cuerpo contra el de la hermana de su amigo. Mientras Pablo y Ivonne intentaban pasarse la pelota, sus cuerpos se rozaban completamente..., lo que daba al resto de los chicos una idea clara de los beneficios extras de este juego. La excitación subía y subía.

Observaban encantados como Ivonne rozaba sus pechos contra el torso de Pablo, como sus mejillas se tocaban...

Cuando Pablo logró finalmente colocarse la pelota en su cuello, repitió al proceso, sólo que a la inversa...

Ivonne se dirigió entonces a Lucas, quien ansiosamente esperaba ser el próximo. Como la mayoría de los chicos a su edad, Lucas era más alto que Ivonne, por lo cual el debió inclinarse para encontrarla. 

Los chicos miraban mientras los torsos de Ivonne y Lucas se tocaban...

Ivonne sentía sus pechos hundirse en el de Lucas..., y no dejó pasar la oportunidad de rozar uno de sus muslos en la entrepierna del chico.

Cuando lograron su propósito, Ivonne no pudo dejar de sorprenderse por la forma en que Lucas pasó su erecto pene disimuladamente sobre los muslos de ella, y como "gran finale", abrazó al chico fuertemente...

Tras Lucas, cada uno de los chicos que faltaban tuvieron su oportunidad de apoyar sus miembros sobre la hermana de su amigo, tanto como ella de rozar sus pechos sobre los de los chicos...

De pronto, el juego casi había perdido su esencia, transformándose en una excusa para abrazarse y rozarse abiertamente...

Javi fue el último de los chicos en tener su turno. Ivonne no quería parecer excesivamente ansiosa por tener un contacto directo con su propio hermano, especialmente delante de sus amiguitos. Ella percibió su erección, y lo atrajo hacia ella, quedando su miembro casi a la altura del monte de venus de ella. 

Ivonne no pudo evitar soltar un casi inaudible suspiro, y recorrió con sus manos la espalda de su hermano..., que respondió repitiendo la acción...

Cuando cada uno de los chicos había tenido dos turnos, Ivonne entusiasmada cortó el juego contra su voluntad, sentándose nuevamente al costado del fuego, sobre un almohadón gigante. Los chicos se sentaron en el sofá y en algunas sillas...

"Qué hacemos ahora...?", preguntó Ivonne...

Mientras los chicos debatían, ella notó que en varias oportunidades sus miradas se centraban en sus piernas, y particularmente en su entrepierna, tratando de ver por debajo de la bata...

Ivonne casi les dio el gusto, separando levemente sus piernas para asegurarse que la "V" de su tanga quedara a la vista de los chicos. Cómo si fuera algo natural separar discretamente las piernas para después cerrarlas dejando solo una guía del camino prometido a recorrer.

Se inclinó hacia delante, y cruzó sus brazos, causando que sus tetas se engrandecieran por sobre la abertura de la bata.

Entusiasmada por la respuesta de los chicos a sus provocaciones, incluido su propio hermano, Ivonne separó sus piernas aún más, provocando que la bata se abriera lo suficiente para dejar su tanga indudablemente a la vista...

Continuará...

Dra. Tentación

Fotos: inthecrack.com

Imágenes de carácter ilustrativo y propiedad de sus creadores originales.